Montilla, un proyecto de convivencia en un modelo de ciudad…

… donde los espacios culturales, educativos, recreativos, de esparcimiento y de convivencia están adecuados para propiciar cohesión social e igualdad entre la población, a través de políticas municipales de fomento de la cultura, la participación ciudadana, el asociacionismo cívico y vecinal, la prevención de situaciones de riesgo de exclusión social y la integración de colectivos más desfavorecidos.

… donde el deporte y la promoción de la vida sana y saludable adquieren autonomía en las actuaciones del Ayuntamiento mediante una política de ampliación e incremento de la dotación de infraestructuras deportivas para la práctica de deportes mayoritarios y minoritarios, apoyando el asociacionismo deportivo, organizando eventos deportivos, fomentando el deporte en los centros educativos y transmitiendo a los colectivos sociales, especialmente a los jóvenes, los valores éticos y convivencia que emanan de la competición deportiva y del esfuerzo en equipo.

… donde los colectivos sociales, vecinales, culturales y deportivos, a través del asociacionismo, tienen presencia y participación activa en el Ayuntamiento, en el que una pluralidad de consejos locales y municipales se han de encargar de hacer efectiva una democracia participativa cada vez más sólida.

… donde la seguridad ciudadana es garantía esencial para que una sociedad sea libre, la igualdad sea efectiva, la ciudadanía asuma compromisos de convivencia y la ciudad progrese y se desarrolle económicamente. De ahí que el Ayuntamiento tenga en el área de seguridad pública un pilar básico de su programa de gestión, priorizando financiación para la dotación de plantillas, tanto de policía municipal como de protección civil, invirtiendo en formación y en la modernización de recursos materiales y apostando por la coordinación entre los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para prevenir en la ciudad conductas contrarias a la convivencia.

… donde las fiestas populares, los eventos socioculturales y las tradiciones festivas son defendidas por el Ayuntamiento como señas de identidad del municipio y de su población, que refuerzan la cohesión social, propician el encuentro entre la ciudadanía, fomentan valores positivos de convivencia, generan actividad económica y atraen turismo.